Te lo digo rápido: sí puedes trabajar mientras estudias en Australia. Y no solo eso, puedes ganar dinero, vivir bien y hasta ahorrar. Pero hay trampa. Te lo cuento.
Porque esto no es subirte a un avión, hacerte cuatro selfies con un canguro y que te lluevan trabajos pagados a $25 la hora. No. Esto va de mover el culo, aprender inglés a trompicones, y decir más de una vez: “¿Puedes repetir eso, por favor?”.
Te vas a reír, a frustrar, a currar como no lo hacías desde el colegio… y te vas a enamorar de una experiencia que vale oro. Así, tal cual.
Vamos al lío.
Lo que necesitas para currar en Australia sin meterte en líos
Australia no es como tu barrio. Aquí las reglas se cumplen. Si vienes a estudiar, necesitas una visa de estudiante (subclass 500). Con eso en el bolsillo puedes trabajar hasta 48 horas quincenales (tú decides cómo las repartes). Y en vacaciones, barra libre: puedes trabajar todo lo que quieras.
Pero espera, que no es solo llegar y repartir currículums.
Vas a necesitar algo llamado TFN (Tax File Number). Si no lo tienes, no existes. Nadie te contrata legalmente. Y sí, es gratis. Solo hay que meterse a la web del gobierno y pedirlo. En 10 días te llega por correo.
¿Y qué más? Ah, claro, seguro médico OSHC, porque si te resbalas fregando en una cocina y no lo tienes, vas a llorar por dos cosas: el tobillo y la factura del hospital.
¿Cuántas horas puedes currar sin que te salten la visa?
Te lo repito porque es clave: 48 horas quincenales. No semanales, no mensuales. Cada 14 días. ¿Te pasas? Te arriesgas a que te cancelen la visa. Así de claro.
¿La buena noticia? En vacaciones (las oficiales del curso, no las que tú te inventes), puedes trabajar full time. Día, noche, fines de semana, lo que aguantes.
Yo lo hice. Me puse a currar en un restaurante durante el break de verano. Dobles turnos, piernas cansadas, pero la cuenta del banco sonriendo como nunca. En cuatro semanas gané lo que en dos meses part-time. Vale la pena.
¿Y cuánto te pagan? Spoiler: no está nada mal
Australia no regala nada, pero paga bien. $24.10 AUD por hora es el salario mínimo en 2025. Si curras un sábado o en turno noche, incluso más.
Tienes derecho a todo: salario justo, condiciones dignas, descansos. Hay leyes, y las cumplen. Hay multas, y las temen. El Fair Work Ombudsman te protege, seas australiano o no.
Yo rechacé un curro donde me ofrecían $15 cash. “Sin TFN, más rápido para ti”, me dijeron. Me fui. Prefiero dormir tranquilo.
¿Qué trabajos puede conseguir un estudiante internacional?
No te voy a vender humo: de entrada, no vas a trabajar en Google. Pero sí hay muchas opciones para estudiantes sin experiencia.
- Cafés, bares y restaurantes: siempre buscan gente.
- Tiendas y supermercados: ideal si te gusta hablar con todo el mundo.
- Limpieza: honesto, bien pagado, y sin dramas.
- Reparto de comida (UberEats, DoorDash): necesitas bici o moto.
- Call centers: si tu inglés lo permite, es buena pasta.
Yo empecé lavando platos. Luego pasé a servir cafés, después a tomar pedidos. En tres meses, hablaba inglés como si fuera mi tercer idioma. No perfecto, pero suficiente para pedir un aumento.
¿Dónde encuentras trabajo?
Aquí no hay magia. Tienes que buscar. Y mucho.
Estas son tus mejores armas:
- Seek.com.au y Indeed.com.au: los dos grandes.
- Gumtree.com.au: como el Craigslist australiano (ojo con los estafadores).
- Grupos de Facebook: estudiantes latinos, empleos locales, etc.
- Patear la calle: sí, imprime tu CV y ve puerta por puerta.
El currículum australiano es minimalista: sin foto, sin edad, directo al grano. Añade tu disponibilidad, habilidades y un teléfono australiano. ¿Carta de presentación? Si puedes, sí. Muchos la valoran más de lo que imaginas.
¿Mi primer trabajo? Lo encontré entrando a un café con cara de buena onda y preguntando: “Are you hiring?”. Me hicieron una prueba al día siguiente.
El TFN y tus derechos (que sí, los tienes)
Ya lo dije, pero lo repito: no trabajes sin TFN. Lo sacas online, gratis, en 5 minutos. Y en este vídeo te enseño a hacerlo:
Tienes derecho a:
- Que te paguen como a cualquiera.
- Que te den descansos.
- Que te respeten.
- A quejarte si algo huele mal (y que te escuchen).
Si algo no cuadra, ve al sitio del Fair Work Ombudsman. Está en varios idiomas y te explica todo, paso a paso.
Vacaciones: trabaja todo lo que puedas (y un poco más)
En vacaciones, sí. Aquí te sueltan la correa. Puedes trabajar full-time sin problema. Muchos lo usan para ahorrar, pagar el semestre siguiente o hacer un viaje.
¿Cómo no morir de cansancio?
Aquí viene lo difícil: no quemarte. Estudiar y trabajar al mismo tiempo puede ser una bomba de relojería si no te organizas.
Consejos de oro:
- Hazte un horario y cúmplelo.
- No aceptes turnos nocturnos si tienes clases a las 8.
- Duerme. Parece obvio, pero se te va a olvidar.
- Di que no si te pasas de rosca. Nadie te va a salvar si revienta tu cuerpo.
¿Vale la pena? Yo te digo esto…
Sí. Mil veces sí. Trabajar mientras estudias en Australia no es fácil, pero es una de las mejores decisiones que puedes tomar.
¿Te vas a cansar? Seguro.
¿Vas a extrañar a tu familia? A veces.
¿Vas a crecer como nunca? Garantizado.
Vas a ganar dinero, mejorar tu inglés, hacer amigos de todos los países, y sobre todo, vas a demostrarte a ti mismo que puedes con todo.
Eso no te lo da ninguna beca, ningún curso online, ni ningún coach motivacional.
Te lo da la vida. Y Australia te la pone en bandeja, si sabes aprovecharla y vienes de la mano de los mejores.
Sin comentarios.